Acceso inmediato

“La amistad incondicional que tenemos en nuestro grupo de ReViVe me ha dado el espacio y la oportunidad de enfrentar y confesar cosas que nunca había compartido con nadie más, cosas que me tenían avergonzada. Nuestra líder realmente me escuchó, sin aprobar lo que estaba haciendo mal, por supuesto, pero permitiendo que el Espíritu Santo me confrontara con su Palabra y me guiara para poder decir honestamente: 'Aquí estoy', sabiendo que Dios amorosamente me recibiría. Eso ha sido muy liberador. Hasta entonces, la culpa me estaba comiendo viva. Ahora puedo ir a Él libremente, no como una excusa para pecar, sino acercándome a Él, en lugar de buscar amor en otros lugares.”